Se están muriendo los sevillanos

Por Oscar H. Aranzazu Rendón
Es bien cierto que en nuestro municipio hemos pasado por episodios constantes en cuanto a las deficiencias en la atención en salud, en donde muchos de nuestro niños tuvieron que nacer en otros municipios y el hospital se convertía en una “sala de despacho” hacia otros centros asistenciales.
El gobierno nacional, acabó con las Unidades de Saneamiento Ambiental, en donde de manera eficaz se ejercía la labor de la prevención en salud que existía en todos los municipios. Pero como el interés oculto no es otro que engordar las arcas de las EPS´s, de propiedad de los de siempre (incluyendo al presidente con el complejo SALUDCOOP), entonces se desmontó esta división como si se tratara de que mas gente se enferme y pague.
En la actualidad existe en el mundo una epidemia creciente de influenza y ha existido por generaciones. Vaya Dios a saber si es otro entuerto de los poderosos dueños de laboratorios, tal y como ocurrió con el “dengue hemorrágico” o el “cólera”, que sirvieron para entrar al país, precursores de desecho declarados peligrosos en los Estados Unidos, como el malathion y para declaratorias de emergencia y así abrir una nueva caja menor para los corruptos.
En Sevilla el peligro que nos acecha es mucho mas letal y ya ha cobrado vidas humanas; LA LEPTOSPIROSIS.
Esta enfermedad es causada por una bacteria, cuyo principal reservorio son los animales silvestres y algunos domésticos. La rata es el principal, debido a que el PH alcalino de la orina de estos animales es muy favorable para la supervivencia de este microorganismo llamado leptospira. El contagio es por contacto con la bacteria o por vía oral principalmente.
Esta enfermedad penetra a través de las mucosas, y se puede alojar incluso en el líquido cefalorraquídeo. No todos los casos son letales, ya que ella misma activa anticuerpos que la destruyen, pero en algunos seres humanos simplemente es invasiva y mortal.
Los pulmones y el hígado son los que finalmente colapsan y causan la muerte, después de un período de incubación que oscila entre los 09 y 13 días, aunque también ataca los músculos y las meninges.
Existen mecanismos de prevención y control, que minimizan el riesgo de contagio. El control de la población de roedores y la revisión médica de los animales domésticos, son la mejor herramienta. Se requiere en Sevilla, una campaña masiva de control de roedores, pero que cubra el 100% de las viviendas y focos como los dispersos ramales de la quebrada San José. Este control debe ser integral, mediante la adecuación y limpieza de sitios que facilitan su proliferación y con la colocación de cebos con su respectivo recambio y control.
El control de roedores sirve no solo para prevenir la leptospirosis, sino para la prevención de la peste de rabia y el tifo murino entre otras patologías.
Después del control de roedores se debe iniciar una fumigación de igual magnitud, no solo por la invasión que tenemos de cucarachas sino porque las ratas son hospederas de miles de pulgas que quedan sin fuente de alimentación.
Otra estrategia de importancia para la prevención de esta y muchas enfermedades, es lavar bien los alimentos crudos que consumimos, principalmente las verduras y frutas que son orinadas y pisoteadas en una danza nocturna de roedores que visitan estos sitios.
Los depósitos o almacenes de bebidas gaseosas o cervezas, son orinados constantemente por las ratas. De ahí, a que en alguna época se les colocara a las latas de cerveza, una protección de aluminio para evitar este contacto, pero luego se suspendió la medida para proteger a las multinacionales de incurrir en costos no previstos, aunque fuera bajo el riesgo de comprometer la vida de los consumidores.
No quisiéramos mas pérdidas de vidas de nuestros coterráneos por esta enfermedad, como presumiblemente ocurrió con ese emprendedor sevillano Iván Restrepo o ahora con la muerte del querido Carlitos Lenis; al igual que en Caicedonia donde ocurrió otro caso en una joven quien también se contagió con la leptospira y murió en pocos días.
Así es pues, a organizar en términos sanitarios; un frente común en contra de las ratas. Pero de verdad…. No como en el gobierno de Víctor Samuel Restrepo, en donde con un jugoso presupuesto, la campaña cubrió solo el 30% de las viviendas y a las otras ratas en vez de rodenticida, les aplicaron métodos psicológicos de disuasión seguramente. Repito. Debe el CIEN POR CIENTO de cobertura, o la platica se pierde.